En la vida no hay nada más aburrido que la monotonía, pues con el tiempo la emoción de las cosas se va esfumando, y quedamos atrapados en un ir y venir, en un circulo sin sentido que no nos lleva a ningún lugar diferente al que ya estamos.
Constantemente sin darnos cuenta vamos cambiando, para bien o para mal, consciente o inconscientemente y por lo general, aquellas personas que se rehúsan a los cambios, son aquellas que no quieren abandonar el pasado, aquellas que se aferran a él, por miedo a lo que pueda venir en un futuro.
El temor a lo desconocido es algo tan común en las personas que somos capaces de vivir en una constante repetición antes de probar cosas diferentes. ¿Por qué somos tan resistentes a los cambios? Conozco personas que se les ha presentados mejores y excelentes oportunidades de empleo y las han rechazado por temor a mudarse de ciudad, por temor a experimentar nuevos cambios.
Les cuento una anécdota; de pequeño siempre me gustaba vestirme con colores claros, un día me llevaron de compra y me obligaron a escoger colores oscuros como: rojo, verde, morado, naranja… colores que nunca había usado. Le decía a mamá en la tienda: “no me mediré esa camisa porque no me queda bien” y ella respondía: “como sabes que no te queda bien?” bueno mamá yo supongo q no me queda bien nunca he usado ese color… me rehusaba incluso a cambiar mi manera de vestir, sentía que me vería ridículo. A la final le hice caso a mi mamá, obligado me compre par de camisas de esos colores, me corte el cabello, cambie de look. No me cayó nada mal, a muchas personas le gustaba, pero yo me sentía incomodo, me miraba mil veces en el espejo y me veía “raro”, poco a poco me fui adaptando al cambio hasta que logre asimilarlo.
Porque preferimos vivir la monotonía antes que hacer algo diferente, ¿No se han dado cuenta acaso, que por más viejo que sea un televisor que tengan en casa, y aunque se vea en blanco y negro prácticamente, aun lo tienen? O que el día de hacer la limpieza no echamos a la basura esa ropa vieja que no usamos porque decimos: “no la votare, aun esta buena un día de estos me la pondré”
Esto se debe a nuestra condición humana y nuestra capacidad de pensar, que, nos aferramos a cosas que nos pertenecieron en algún momento, independientemente de que tengamos o no, el dinero para comprar otras cosas… Porque si esta fuera la excusa, ¿Cómo se explica, que justo el día en el que se dañe el TV, de inmediato compramos otro? ¿Por qué no comprarlo antes de que se dañe y nos deshacemos del viejo?
La respuesta está en cada uno de nosotros, dependiendo de nuestro juicio y personalidad y esto, no es más que un argumento para decir que, "No debemos esperar a no ver una salida en nuestras vidas, no debemos esperar, a llegar al punto de no saber qué hacer con ella, constantemente debemos cambiar, no cambios radicales, cambios sutiles que permitan día a día ir descubriendo nuevas cosas, conociendo nuevas personas y adquiriendo nuevas experiencias"
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